29 de junio de 2012

Tiramisú


Como os dije en el último post, nos encanta la comida italiana por lo que, muy a menudo, preparamos para comer o cenar algún plato con receta de origen italiano. Y todas, sin excepción, un auténtico éxito.

Continuando con las recetas de comida italiana, hoy os queremos explicar un postre sencillo y súper sabroso, se llama “Tiramisu”.

Para hacer un tiramisu se puede encontrar un buen número de recetas, pero bueno, la nuestra es quizá de las más sencilla y sabrosas (¿alguien nos va a contradecir? ¡ja, ja, ja!).

Necestamos los siguientes ingredientes:

3 yemas de huevo
2 claras de huevo
100 gr. de azúcar
250 gr. de mascarpone
100 gr. de bizcochitos (por ejemplo, de soletilla o Savoiardi)
100 gr. de chocolate negro
150 gr. de café
Cacao en polvo

El primer paso será preparar una buena taza de café (cuidado, ¡no es para tomar!... si necesitáis uno, mejor preparáis 2 tazas). Este café lo deberéis apartar un momento.

A continuación, en un bol, pondréis las claras con una pizca de sal, y lo batiréis todo con la ayuda de la batidora eléctrica hasta conseguir llevarlas a punto de nieve. Cuando lo consigáis, las dejaréis reposar un par de minutos.

Mientras, en un bol más pequeño, pondréis las yemas con el azúcar y lo mezclaréis bien con la batidora manual hasta conseguir una masa cremosa y regular. Cuando la tengáis, le añadiréis el mascarpone y continuaréis removiendo hasta conseguir, de nuevo, una masa cremosa y homogénea.

Con esto preparado, toca enfrentarnos al punto más delicado, juntar las claras a punto de nieve con la crema de mascarpone. Para ello, iréis integrando la crema a las claras con una espátula y haciendo suaves movimientos envolventes para evitar que el punto de nieve pierda su esponjosidad. El resultado será una crema suave y totalmente homogénea. 

Hasta aquí, ¿todo bien? ¿Sí, no? Bueno, pues ya lo tenéis todo preparado, solo os falta presentar el plato.

Para hacerlo, escogeréis los recipientes de postre que más os gusten y le pondréis en la base unos bizcochos impregnados con café (cuidado, sólo un poco húmedos con café) hasta tapar la base del recipiente, a continuación, encima de los bizcochos, extenderéis una capa de mascarpone, y encima suyo, rayaréis un poco de chocolate negro.

Fácil, ¿no? Bueno, estos últimos pasos, deberéis repetirlos hasta llenar totalmente el recipiente escogido, eso sí, dejando siempre que la última capa sea una de mascarpone, en la que, espolvorearéis un poco de cacao.

Este es un posible resultado:


Tiramisu
Cuatro raciones de Tiramisu


Os garantizo que este es un postre buenísimo, además de una fantástica opción para acabar cualquier comida o cena, ya sea con amigos o familia.

¡Buen provecho!

16 de junio de 2012

Rissotto con setas y trufa negra

Ya sabéis que a mis dueños les encanta la comida italiana, ¿verdad? ¡Qué os voy a contar, meh, meh, meh! La cosa es que últimamente han subido un peldaño más el listón, y no pasa semana que no preparen algún plato de receta italiana.

La verdad, no me debería extrañar mucho, pues ese par tienen un montón de recetas inspiradas en la cocina italiana, así que, he decidido que os las iré presentando por aquí, poquito a poquito, que gatito estresado no es buen consejero.... ¡meh, meh, meh!

Empezaré este pequeño recopilatorio con un arroz; concretamente con un “rissotto” que además lleva el sugerente nombre de “Rissotto con setas y trufa negra”. ¿Os apetece?

Para dos personas, mis dueños prepararon los siguientes ingredientes:

180 gr. de arroz arbóreo.
15 gr. de trufa negra
700 ml. de caldo de pollo (o de pesado)
Una cebolleta
Un diente de ajo
100 ml. de vino blanco
180 gr. de setas variadas
40 gr. de queso parmesano
Pimienta negra
Aceite
Sal


Para empezar deberéis lavar el arroz. Hecho esto, picaréis el diente de ajo y la cebolleta, y deberéis lavar y cortar las setas. Mientras lo hacéis no estaría mal aprovechar el tiempo ¿verdad?, pues ala, ¡a calentar el caldo!

Con las setas cortadas, y el caldo calentando, deberéis coger una cazuela y poner a calentar en ella, un chorretón de aceite. Cuando esté caliente, añadiréis la cebolleta y la dejaréis pochar lentamente. Una vez pochada, deberéis añadir, las setas, el diente de ajo picado, y el vino.

Cuando el vino de cazuela se haya evaporado, añadiréis el arroz y lo cubriréis con una tercera parte del caldo. Según escuché a mis dueños, este es el punto más complicado de la elaboración del rissotto, así que, atención a la receta, y sobre todo, si la hacéis, al arroz… Cuando el primer tercio de caldo se haya evaporado, añadiréis otro tercio, y lo dejaréis cocer, removiendo para que no se pegue hasta que, una vez más se haya evaporado. Llegados a este punto, deberéis añadir la trufa rayada, el queso parmesano y el resto del caldo, removiendo una vez más para evitar que se pegue.

Unos cinco minutos después, cuando aún quede algo de caldo en la cazuela, apagaréis el fuego, taparéis la cazuela y dejaréis reposar el arroz. Con esto, ya tendréis un fabuloso rissotto (como mínimo eso dijeron ese par, porqué yo, ni catarlo…¡¡grrr!!)... cremoso, caldoso... ¡¡hmmm!!

Os ha parecido fácil, ¿verdad? Pues mirad que pinta tenía el que prepararon mis dueños:

Ración de Risotto con setas y trufa negra

Este plato es una pequeña delicatessen, o por lo menos eso dijeron mis dueños y sus invitados, mientras lo saboreaban.

7 de junio de 2012

Restaurante Ginza Teppanyaki - Vitoria-Gasteiz


Restaurante Ginza Teppanyaki - Logo
Lo de los restaurantes japoneses en Vitoria-Gasteiz es un caso a parte, de verdad os lo digo. Desde que ando por aquí, sólo he conocidos dos, y mis dueños, catado uno, y después de muchos meses escuchando las mil y una barrabasadas de la gente de por aquí.

Bueno, la cosa es que, después de un tiempo con la intención de probar el “Ginza Teppanyaki” (que así se llama el restaurante en cuestión), y rechazar la idea por considerar que se trataba de un restaurante demasiado caro para lo que ofrecía, llegó el momento en que el estómago venció a los prejuicios. Como a mis dueños la comida japonesa les encanta, decidieron que no valía la pena aplazar más tiempo su visita al restaurante.

El “Ginza Teppanyaki” se encuentra situado en la calle Ignacio Díaz de Olano número 1 de Vitoria-Gasteiz.

El restaurante, dispone de varios menús:

Los días laborables:

Menú diario (vale entre 10 y 15 euros, según la variante que se escoja)

Cada día:

Menú degustación (por 23 euros)
Menú “Teppanyaki” (vale entre 30.5 y 48.5 euros)
Menú Imperial (por 26 euros)

En todos los casos, deberéis añadir el IVA y la bebida, pues los menús no los incluyen.

Mis queridos dueños escogieron el ‘Menú Imperial’ (les hizo decidir el hecho que incluía varios platos preparados con la técnica Teppanyaki) el cual estaba compuesto por los siguientes platos:

  • Ensalada de pollo y aguacate
  • Mixto de tempura

  • Sushi de anguila
  • Maki de atún
  • Sashimi de salmón

  • Solomillo de ternera al estilo Teppanyaki
  • Langostinos al estilo Teppanyaki
  • Pato laqueado con verduritas
  • Espaguetis finos salteados

  • Postres (Sushi de plátano con chocolate y nata)


A decir verdad, mis dueños comieron mucho, y además muy bien. Según escuché, la totalidad de ingredientes era frescos, la presentación de los platos de primera, etc.

Quizá el restaurante “Ginza Teppanyaki” no es el mejor restaurante japonés, pero os aseguro que en Vitoria-Gasteiz no hay muchas más opciones, por tanto si queréis comer un buen sushi, este es vuestro restaurante en la ciudad.

Si finalmente os decidís y queréis ir, aquí os dejo tanto su dirección como su teléfono:



01008 Vitoria-Gasteiz

Tel: 945 15 87 52